martes, 11 de diciembre de 2012

Pronto fueron subyugados ellos,como el resto de nosotros,por las huestes mahometanas,y hoy viven sometidos al yugo con el que nos han uncido a todos.¡Quiera Dios que cuando vean a sus caudillos encadenados tomar el camino de la esclavitud,o envíen a sus hijas a los harenes de los vencedores,se arrepientan de todas las ocasiones en las que alzaron sus armas contra sus reyes cristianos!
Porque en la noche del 27 al 28 de abril,mientras Rodrigo combatía a esos paganos en el norte,los guerreros de Alá pusieron pie a tierra en la roca de Calpe,arrollaron a las menguadas tropas que comandaba el sobrino del rey y comenzaron su avance hacia el interior de la península.Eran en su mayoría berberiscos,como el propio Tariq,conocidos por su ferocidad y destreza como jinetes.Sembraron el terror entre los desdichados que tuvieron la desgracia de cruzarse en su camino,como un anticipo revelador de lo que habría de ocurrir a partir de entonces en todos los confines de la nación.
DEL LIBRO "ASTUR", DE ISABEL SAN SEBASTIÁN