El congresista Anthony Weiner es el último famoso al que un escándalo sexual arruina su vida privada y su carrera
La maldición de las actrices porno

Acorralado por un escándalo imposible de dominar, hundido moral y políticamente, sin crédito ante su familia ni los votantes, el congresista demócrata Anthony Weiner decidió finalmente tirar la toalla y presentar su dimisión tras el escándalo generado por las fotos de contenido sexual que enviaba por internet. La puntilla se la ha dado una actriz porno, Ginger Lee, una de las destinatarias de los mensajes. Pero Weiner no es el único famoso al que una actriz porno ha arruinado su vida.

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Si usted es un famoso y una actriz porno le anda rondando, tómese unos minutos antes de abrir la puerta, responder un sms o enviar un correo. Lea este aviso para navegantes con atención y, después, decida. Pero sepa que, tarde o temprano, la maldición de las actrices porno se cobra factura.

El último en pagar por sus pecados ha sido el congresista demócrata Anthony Weiner. El pasado viernes enterró en cuatro minutos de declaración sin preguntas su carrera política después de que, durante semanas, se fuera descubriendo que el tiempo que le sobraba cuando no estaba trabajando ni admirando la belleza de su mujer, una colaboradora de Hillary Clinton de la que está esperando un hijo, se dedicaba a exhibirse en correos y mensajes de alto contenido sexual.

Una de las seis destinatarias a las que Weiner ha admitido enviar correos era la ex actriz porno Ginger Lee, quien ha denunciado que el congresista le pidió que lo ocultara cuando estalló lo polémica. Lee, por supuesto, no sólo no lo hizo, sino que leyó en público algunos de estos mensajes. Sólo un ejemplo: “No estás dando crédito a mi paquete”.

Lo cierto es que la de Ginger Lee es sólo la última polémica en la que las actrices porno o mujeres relacionadas con el mercado del sexo se han cruzado en el camino de los famosos, con mayor o menor premeditación, en una peligrosa relación que siempre acaba mal. Y un dato para la reflexión: ¿por qué en la mayoría de los casos están casados con auténticas sex symbols?

La pasada semana, sin ir más lejos, el actor británico Sean Bean (Boromin en “El Señor de los Anillos”) resultó herido en un pub de Londres por defender a su compañera, la ex modelo de Playboy April, de los comentarios soeces de un cliente, según informó The Daily Mail.

Pero hay mucho más. Aquí van sólo unos ejemplos de los famosos que han ingresado por la puerta grande en el club de los escándalos sexuales:

Charlie Seen: encabeza la lista porque es reincidente, al menos en denuncias recibidas. La primera, Chloe Jones, tambaleó su matrimonio pero no lo derrumbó. La segunda, Capri Anderson, acabó con un turbio incidente en la habitación de un hotel y ella encerrada, de puro miedo, en el baño.

Hugh Grant: su traspié es de los más conocidos. Ocurrió hace diez años, cuando fue sorprendido con una prostituta que le practicaba sexo oral en la parte trasera de su coche. Una vez más, como ocurre casi siempre, el infiel en cuestión tenía como pareja formal a una de las mujeres más deseadas, en este caso la también actriz Elizabeth Hurley. La carrera de Grant se tambaleó, pero el actor logró salir a flote.

Tiger Woods: su incontinencia sexual era tan extensa que abarcó todos los terrenos. También el de las modelos y las actrices porno. Puestas a denunciar, una de ellas, Veronica Siwik-Daniels asegura haberse quedado embarazada hasta en dos ocasiones del deportista, aunque él nunca lo llegó a saber y ella abortó las dos veces.

Jesse James: las portadas las acaparaba su esposa, la actriz Sandra Bullock, hasta que se destapó que mantenía encuentros sexuales con una actriz porno hasta en su propia casa, cuando Bullock estaba de rodaje. El matrimonio, recién estrenado, terminó ahí. También cayeron en la infidelidad, aunque esta vez con mujeres de menos renombre, los actores Balthazar Getty o Jude Law (en este caso, con la niñera), o Eric Benet, compañero de Halle Berry, que perdió por su afición al sexo a la que por aquel entonces era la actriz del momento.

Del césped a la cama: los escándalos sexuales no son sólo exclusiva de los protagonistas del mundo del cine. Varios jugadores de la selección italiana y de la primera división mantuvieron relaciones con la actriz porno brasileña Aurora Oliveria. “Me voy a la cama con futbolistas de la Serie A y de la selección italiana. Todos están casados. A veces lo hago en la habitación junto a la de los entrenadores, pero ellos no entran”, confesó la propia actriz.

En otros casos la relación fue estrictamente contractual y de marketing, como el apoyo de María Lapiedra a la candidatura política de Joan Laporta. También en este caso salieron tarifando.