SI ESTO ES POLÍTICA SERIA.....

El «todo vale» adereza la propaganda política
La campaña catalana toca el clímax: sexo, orgasmos y políticos en toalla

La provocación y el escándalo no son técnicas nuevas en el desarrollo de las campañas electorales. «Que hablen de ti, aunque sea mal», es una premisa habitual de la publicidad. Con el peso actual de las redes sociales, mantenerse en el candelero, por el motivo que sea, es lo que los candidatos buscan en el tramo final de la campaña.


La campaña catalana entra en la recta final subida de tono. En esta ocasión, no tanto por el cruce de declaraciones entre los candidatos, sino por el tinte «sexual» que ha adquirido la pugna electoral. Atrás queda la agresividad de los vídeos con violentos dóbermans, o aquél que mezclaba el testimonio de un neonazi con un sacerdote. Si Greenpeace apuesta por el destape bajo el eslogan «Estoy caliente» para denunciar el cambio climático, o los antitaurinos se desnudan con banderillas «clavadas» a la espalda, la política no podía quedar al margen.

La consigna ilustrada de «un hombre, un voto», ha dado pie a «un voto, un orgasmo». O en su caso, «un vídeo, un escándalo», a tenor de la dinámica audiovisual por la que han apostado diferentes partidos.

Al desnudo de Albert Rivera en la campaña de 2006, se une ahora el montaje de las juventudes socialistas -que equipara el voto al PSC con un orgasmo- y el vídeo que previamente había sacado a la luz Montserrat Nebrera, un subgénero que mezcla sexo y denuncia.

«Desesperación» política

La presidenta de la Confederación Nacional de Mujeres en Igualdad, Mercedes de la Merced, ha sido tajante: «Muy desesperados tienen que estar los políticos catalanes» para que en la campaña estén utilizando como propaganda el sexo y las mujeres.

«No necesitamos sobresalir con orgasmos, ni toallas, ni ir medio desnudos», ha declarado Artur Mas, candidato de CiU. Más directo ha sido el portavoz de su partido en el Congreso, Josep Antoni Duran Lleida, que ha opinado que vídeos «soeces» como este «perjudican» la participación.

Esta es, junto a la del PP, la posición más «conservadora». Las juventudes de los socialistas catalanes han colgado un vídeo en el que una joven tiene un orgasmo al votar por el presidente catalán y candidato del PSC a la reelección, José Montilla, que se ha mostrado sorprendido al ver las imágenes y ha preguntado en un par de ocasiones: «¿Seguro que esto es un vídeo de nuestras juventudes?». «Si esto ayuda a que la gente vote, bien está», se ha limitado a comentar.

«El vídeo de Montilla atenta contra la dignidad de las mujeres y es absolutamente inaceptable», ha dicho Alicia Sánchez-Camacho, la candidata del PP.

En ICV, Joan Herrera se lo ha tomado con humor: «Se me hace muy difícil conseguir llegar al orgasmo votando a cualquiera de los candidatos, yo incluido».

El vídeo «porno» de Nebrera

Ha echado leña al fuego Montserrat Nebrera, excandidata del PP. También apuesta por los mensajes de índole sexual para tratar de ganar votos. Su grupo ha sacado a la luz un trabajo bajo el nombre «El vídeo porno de Montserrat Nebrera», que no es más que una mera simulación, porque «en política no todo vale», dice la protagonista.

Con el sonido de fondo de los jadeos de una mujer, aparecen rótulos con frases de denuncia política dirigidas al Govern. Un orgasmo femenino en la ducha da paso a la líder de Alternativa de Govern, ataviada con una toalla: «Si quisiera provocar un escándalo, me la quitaría», concluye Nebrera.

Albert Rivera, un candidato al «desnudo»

«Todas las encuestan apuntan a que habrá poca gente que querrá tener relaciones sexuales con el candidato socialista José Montilla», ha indicado el candidato de Ciutadans. Rivera, líder del partido, apareció en dos campañas de propaganda electoral en 2006 sin ropa.

Aparecía vestido en el anuncio pero utilizando a varias personas paseando desnudas, bajo el lema «Rebélate».

Aído pone la guinda al pastel con la «publicidad engañosa»

La secretaria de Estado de Igualdad, la socialista Bibiana Aído, ha echado mano de la ironía al asegurar que el vídeo electoral del PSC debe ser «publicidad engañosa». «Si fuera verdad, la participación subiría de forma muy importante, pero yo creo que estamos ante una publicidad engañosa...», ha bromeado.